Segundo disco de The Doors, con su alta carga de sicodelia musical y sus letras intelectualoides, producto de todo lo que Jim Morrison tenía que expresar desde su adolescencia.
Esta es una de tantas producciones que se vieron influenciadas por el tremendo batacazo que fue el Sgt. Pepper de los Beatles, toda vez que aquel músico que creía (con autosuficiencia o con verdadera humildad) que había tocado su techo y que no había más que buscar se tuvo que dar con una piedra en los dientes al oír semejante monstruosidad sonora. Es por ello que Morrison, Densmore, Krieger y Manzarek (bajo la producción de Paul Rotchild) se soltaron a experimentar en el estudio, dando como resultado este disco, que si bien no alcanza las cotas de calidad de su álbum anterior, al menos sirvió para mantener unas ventas más que decentes.
Es a partir de este momento en que sale a relucir el álter ego de Jim Morrison, el infame Lizard King el cual sirvió para desenmascarar todos los temores del vocalista sobre el escenario, con todos los inconvenientes que eso representaría para la banda en cuanto a la exagerada censura a la cual fueron expuestos.
01. Strange days
02. You're lost little girl
03. Love me two times
04. Unhappy girl
05. Horse latitudes
06. Moonlight drive
07. People are strange
08. My eyes have seen you
09. I can't see your face in my mind
10. When the music's over
Todos los temas compuestos por The Doors: Jim Morrison, John Densmore, Ray Manzarek y Robby Krieger.
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