Gran disco de Adalberto Álvarez, demostrando una vez más su maestría a la hora de hacer música bailable y muy rica en calidad, en abierto contraste al virtuosismo del que la timba hizo gala por muchos años y que en muchas ocasiones sacrificó el factor "baile", y es que Álvarez bebe aún de la inmensa fuente musical tradicional cubana y simplemente lo traslada a la actualidad por medio de un sonido contemporáneo y que no suena antiguo, mucho menos desfasado.
Esta producción está hecha para homenajear a las ruedas de casino, expresión que causó furor en los salones de baile habaneros a principios de los años 50 (aquí hay que hacer notar que en Cuba el baile se individualizó, desplazando así a la clásica danza en pareja por una expresión más libre). Con la voz del debutante Michel González, quien permanece hasta hoy en la orquesta, Adalberto se anotó un tanto importante ya que varios de los temas de este disco permanecen en su repertorio.
01. Para bailar casino (Adalberto Álvarez)
02. Loco enamorado (Adalberto Álvarez)
03. Raíces (Adalberto Álvarez)
04. Deja la mala noche (Adalberto Álvarez)
05. Esa mujer (Osnel Odit)
06. Tumba, timbal y bongó (Adalberto Álvarez)
07. Señora (Alberto Cárdenas)
08. El hechizo (Adalberto Álvarez)
09. Máquina para bailar (Adalberto Álvarez)
10. Son para un amor sincero (Lourdes Torres)
11. Loco enamorado [Versión bolero]
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